Muchas veces pensamos que los cosméticos más caros de una tienda son los que tienen más calidad. Sin embargo, aunque estos cosméticos dan buenos resultados, también existen productos que podemos encontrar en casa y que además de ser mucho más económicos, son muy efectivos para mantener una piel saludable.

Propiedades de la miel para la piel
Propiedades antisépticas: gracias a sus encimas naturales, la miel ejerce una acción desinfectante que ayuda a eliminar toxinas y otros restos de suciedad del rostro, manteniéndolo así más limpio y previniendo la aparición de impurezas.
Propiedades exfoliantes: debido a su alto contenido de azúcares, este producto ayuda a eliminar la acumulación de células muertas en la piel. De esta forma, la miel revitaliza nuestro rostro y favorece la regeneración celular.
Propiedades hidratantes: gracias a su riqueza en vitaminas y minerales, la miel está considerada como un poderoso humectante natural que puede mantener la piel hidratada durante todo el día.
Propiedades astringentes: la miel es un remedio casero ideal para rostros grasos, ya que reduce la acumulación de bacterias en la piel. De esta forma, la miel también ayuda a prevenir otros problemas como el acné.
Propiedades antioxidantes: si buscas una mascarilla para las arrugas, la miel es un ingrediente ideal para reducir este tipo de imperfecciones, pues su riqueza en antioxidantes evita la formación de arrugas y mantiene la piel más tersa y firme.

Propiedades del bicarbonato de sodio para la piel
Propiedades exfoliantes: debido a su textura, el bicarbonato es muy efectivo para retirar las células muertas y otros restos de suciedad acumuladas en la piel del rostro, dejando una piel suave e iluminada.
Propiedades astringentes: el bicarbonato sódico es rico en sustancias alcalinas, lo cual le otorga un efecto que regula el pH del rostro. De esta forma, reduce el exceso de grasa y oleosidad del rostro, por lo que también resulta un producto excelente en el caso de pieles grasas o con tendencia al acné.
Propiedades blanqueadoras: debido a su riqueza en antioxidantes, el bicarbonato sódico cuenta con un efecto blanqueador que atenúa las manchas oscuras y unifica el tono natural de la piel.
Propiedades anti-inflamatorias: el bicarbonato puede ayudar a aliviar algunos síntomas de resequedad como los picores, la inflamación y la descamación en la piel. Además, también reduce el enrojecimiento provocado por picaduras y favorece el proceso de cicatrización de las heridas.

Ingredientes
1 cucharada de miel 
Media cucharada de bicarbonato de sodio

Preparación y tratamiento
Añadir en un recipiente media cucharada de bicarbonato junto con una cucharada de miel. Una vez hayas añadido los ingredientes, mezclar hasta que se forme una especie de pasta.
Con el rostro limpio y seco, aplica la mascarilla por el rostro pero evita las zonas sensibles como la piel que está alrededor de los ojos y labios.Deja que actúe la mascarilla sobre el rostro 10 minutos.
Retirar con abundante agua tibia y luego seca el rostro con una toalla suave. Aplica una crema hidratante para una piel más suave.